sábado, 25 de abril de 2009

L'homme de Washington: crítica

Ya he adquirido y leído L'homme de Washington. Supera en nivel a los dos anteriores y nos hace apreciar una mejoría en la calidad de las historias. Ahí va la crítica al detalle:

Argumento:

El argumento nos hace volver la vista atrás a las aventuras estilo road movie clásicas de Morris y Goscinny, como El ferrocarril en la pradera, La caravana, La diligencia o El hilo que canta. Pero aquí es diferente, no se trata de conducir pioneros ni viajeros, sino al candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos: Rutherford Birchard Hayes (y futuro presidente).

Como muchas otras veces, Lucky Luke es solicitado en Washington para proteger al candidato en la gira que va a realizar por todo el Oeste. Contará por supuesto con varios enemigos: Sam Palin, Perry Camby (una caricatura de George Bush Jr.), cazadores de recompensas, miembros del Ku Kux Klan e incluso Billy the Kid. Lucky Luke inicia la gira escoltando a Hayes, que viaja junto a su mujer: "Lemonade Lucy", ya aparecida en Sarah Bernhardt con el papel de antagonista. Hayes tiene que hacer frente a varios problemas, en el Oeste no es fácil hacer sermones, a no ser que sean sólo para vacas.

Siguiendo el trayecto, pasan por un pueblo a lo germano donde celebran la Oktoberfest para llegar a Memphis tras salvar al pianista Scott Joplin de las garras del Ku Kux Klan. En Memphis, Hayes tiene que hacer la política cantando para que le presten atención. En el escenario se produce un hecho que va a evidenciar que hay un traidor entre el equipo formado por el asesor Pear, el cocinero Vattel, el mayordomo Freddy y el maquinista Lantyer.

Después de no poder continuar en tren, se produce una graciosa incidencia con los chinos para seguir viajando en diligencia. Son especialmente humorísticos el maquinista conduciéndola y el predicador haciendo diligencia-stop. Seguidamente todo el comité es capturado por los indios pero liberado posteriormente tras obsequiar al jefe con "agua de fuego".

Y ya llegamos a Texas donde se produce la campaña electoral contra el candidato republicano ilegal Perry Camby, que ha sublevado a la gente contra Hayes. La escena final en el teatro, con un giro algo flojo -Lucky Luke apuntando con pistola al apuntador que le sopla a Camby lo que ha de decir, y así darle un texto modificado, gracias al cual Camby cuenta que sólo quiere enriquecerse- Pero la calidad sube y éste se saca el revólver en medio del escenario apuntando a Hayes, y ¡bang!

Hayes desarma hábimente a su enemigo pero entonces se descubre al verdadero enemigo, al traidor que forma parte del comité (¡sorpresa! no voy a contar el final también) y aparece Billy the Kid para asestar el golpe de teatro definitivo. Pero al fin acaban todos bien y Hayes consigue hacerse con la presidencia. Eso sí, sin probar nada de alcohol en la Casa Blanca; sólo limonada, como le ordena su autoritaria mujer.

La portada:

El libro me ha gustado. Es mejor que los dos anteriores de Gerra y Achdé y el dibujo tiene más similitud con el de Morris. Achdé es un dibujante fantástico y sabe adoptar un trazo que a Morris le habría sorprendido por como se le parece. Un solo pequeño inconveniente es la portada, muy bien dibujada pero con tableta gráfica, lo que hace que ciertos seguidores de Lucky Luke la desprestigien. A mí no me acaba de gustar el Jolly Jumper de pie con las manos arriba.


Caricaturas y referencias:

Ahora para hablar de caricaturas y de guiños necesitaremos varias líneas. Podríamos empezar por la de George W. Bush como Perry Camby y su asistente, caricatura de su respectivo ex-vicepresidente.

Se citan y salen varios personajes reales, como los presidentes Andrew Johnson y Ulysses Grant; Scott Joplin, rey del ragtime. El presidente Rutherford B. Hayes y su esposa, por supuesto; y el candidato demócrata a la presidencia Samuel Tilden. Hayes cobra un aspecto más bajito y rechoncho que en el álbum Sarah Bernhardt (1982), donde ya era presidente y tenía un aspecto mucho más respetable. Su esposa, Lucy, no nombrada en el álbum de los 80, era realmente apodada Lemonade Lucy por su aversión al alcohol, recurso humorísticamente utilizado en el álbum. Otros personajes reales son Harriet Beecher-Stowe, el general Custer, Mark Twain y Buffalo Bill.


Siguiendo con las caricaturas, Jack Lantyer, el maquinista, es una caricatura del actor Jean Gabin, en referencia a su papel de Jacques Lantier en la película de 1938 La bestia humana. Jean Gabin ya fue caricaturizado por Morris en Lucky Luke contra Joss Jamon (1957)
Se caricaturizan también los protagonistas de la serie The Wild Wild West, Robert Conrad y Ross Martin.

Otra viñeta a destacar es una en la que se caricaturiza a Elvis Presley cantando Love me tender y a un pequeño miembro de los Jackson Brothers llamado Michael de cuya nariz se burlan. También se encuentra el Heart Break Hotel, aludiendo a la canción de Elvis.

Otra caricatura es la de Marc-Olivier Fogiel, productor de emisiones de televisión y radio francés que aparece como un periodista.
También se repiten las caricaturas hechas por Morris de Lee Van Cleef bajo el aspecto del cazador de recompensas Elliot Belt aparecido en el álbum Cazador de recompensas (1972), y la de John Carradine bajo el del tramposo Sact Thumbs, aparecido en La diligencia (1968).

Otra caricatura me parece que es la de Pierre Tchernia, una de las personas a quien Achdé le dedica el álbum. Cabe destacar que era amigo de Goscinny y Uderzo y fue caricaturizado varias veces en los álbumes de Astérix.
Las múltiples referencias a la actualidad están, la mayoría, camufladas en el nombre de varios personajes: Sam Palin, en referencia a la mediática Sarah Palin; Britney Schpires, Britney Spears. Hay también una imprenta llamada Guth & Berg, donde el editor ordena a un pequeño llamado Jonas que vaya a llamar a sus hermanos (¿Los Jonas Brothers?); hay otro guiño un poco forzado en el que un germano llamado Berlin tiene un muro que se derriba cuando lanzan dinamita detrás "El muro de Berlín ha caído"; se hace referencia a otras canciones: Pas de boogie-woogie, de Eddy Mitchel, y Toute la musique que j'aime de Johnny Hallyday:
Aquí podemos ver la canción de Johnny Hallyday.



También se hace una referencia a la famosa canción de los Beatles Lucy in the Sky with Diamonds, durante el transcurso de un "Pow-wow" en el que fuman una pipa de la paz con alguna sustancia extraña.




También se alude a la presidencia de Obama, ya que Hayes promete a Scott Joplin que llegará a haber un candidato negro. Hay otra graciosa referencia a la película Con faldas y a lo loco, con Jack Lemmon, Tony Curtis y Marilyn Monroe, donde el predicador es seducido por una squaw. ¿Quién no recuerda la escena del final? ¡Nadie es perfecto!

Los mejores gags:

Las dos primeras páginas son sensacionales, con Billy the Kid. También son de destacar el gag anterior y el de los chinos.