domingo, 16 de diciembre de 2007

Billy the Kid, víctima de la censura

El personaje de Billy the Kid fue censurado a la salida del álbum en 1962. En aquella época, los cómics extranjeros (Dupuis es una empresa belga) pasaban a través de una “comisión de censura francesa”, reputada por su severidad. Ésta decidió que la viñeta 6 de la página 3 del álbum, en la que Billy the Kid bebé chupa el cañón de una pistola, debe estar prohibida. En aquella época, las ediciones Dupuis advierten a los autores de la reacción de un miembro de la comisión: “M. Barbariche está al principio impresionado por el carácter “abominable” de la primera página interior. Desde su punto de vista, es lamentable que un bebé utilice un revólver, aún descargado, a modo de tetina. El ataque de la diligencia por Billy the Kid tampoco fue del gusto de la comisión que odia la violencia. M. Barbariche deplora la abundante utilización de revólveres que se hace al largo de este álbum. Nos recuerda que deberíamos evitar en nuestras historietas las armas de fuego, ya que es probable, que disguste a la comisión. Sin embargo, M. Barbariche alaba la portada de Billy the Kid, bien por la parte del dibujo y por la del color. Nota que el lado moral que se desprende de la historia puede impresionar favorablemente a la comisión, así podrán considerar el buen personaje de Lucky Luke en oposición al de Billy the Kid, que en último análisis, se encuentra fuera de estado de ser perjudicado por un adulto.”

Goscinny comparece ante la comisión para explicar que es indispensable para sus personajes llevar revólveres:

“Y es terriblemente fastidioso porque es una historia de cow-boys con Pieles Rojas, con la caballería y todo. Y con Morris, pensamos a veces que vamos a acabar por pagarnos un baño de sangre, para desahogarnos un poco.” El seis tiros de Billy the Kid será reemplazado en la segunda edición por un biberón. Habrá que esperar hasta 1981 para recuperar el dibujo original:

domingo, 9 de diciembre de 2007

Cumpleaños de Morris

Ante todo, perdón por esta larga ausencia y por la actual publicación de esta entrada, cosa que tendría que haber hecho antes, pero bueno, nunca viene de más una felicitación, aunque sea en retraso, ya que el pasado 1 de diciembre hizo 84 años que nació, en 1923. Así que, ¡felicidades, Morris, estés donde estés!